Con el reinicio de actividades turísticas al 30 por ciento en Acapulco, decenas de vendedores ambulantes reactivaron la búsqueda de ingresos económicos para su familia luego de tres meses en los que no pudieron vender sus productos por la ausencia de bañistas.
Los vendedores de artesanías y ropa de playa, así como las masajistas, desafiaron a las autoridades quienes indicaron que no se reactivaría esta actividad informal, ya que la necesidad de percibir ingresos económicos lo ameritó.
Sin cumplir los protocolos de sana distancia, las masajistas se acercaban a los paseantes para brindarle su servicio, mientras que los grupos de personas tampoco respetaron la indicación de la autoridad de guardar una distancia de 1.5 metros entre cada uno.
Cabe mencionar que decenas de personas que vivían de las playas, decidieron salir a las calles de mayor afluencia de vehículos para pedir dinero o limpiar parabrisas, mismos que continúan ahí debido a qué son pocos los paseantes qué están llegando a los destinos turísticos de Guerrero.
