Vestidos con diversos atuendos, decenas de católicos llevaron al niño Dios a la iglesia de Nuestra señora de la Soledad, ubicada en el zócalo de la ciudad, para bendecirlos en el marco de la celebración del Día de la Candelaria.
Pese a estar en pandemia y con los protocolos de sana distancia y con una afluencia del 50 y 70 por ciento, la catedral se mostró abarrotada por creyentes quienes con devoción acudieron para conmemorar los 40 días del nacimiento de Jesús.
El ingenio se percibió en cada una de las imágenes de porcelana donde los niños eran vestidos de diferentes maneras y postrados en portabebés, pesebres de palma, cunas y sillas para bebé Jesús.
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La misa fue celebrada por el Padre Benigno García Alvarado, quien bendijo a todos los presentes, a los niños Dios de porcelana y pidió que se acaben los contagios del Covid-19.
El origen del día de la Candelaria es religioso ya que la presentación del niño Jesús es el motivo principal del festejo, sin embargo, en México se le ha dado un giro también culinario ya que las familias realizan una tamaliza invitada por la persona que haya encontrado al niño en la rosca de reyes.
