/ martes 19 de febrero de 2019

Barça deja vivo al Lyon y Liverpool y Bayern no se hacen daño

Los juegos de vueltas se jugarán el próximo 13 de marzo en Barcelona y Munich respectivamente

El Barça dejó vivo al Lyon en la ida de los octavos de final de la 'Champions' (0-0) y evidenció su falta de gol frente a un rival que plantó cara en el primer tiempo, pero que estuvo a merced de los azulgranas en el segundo, cuando los de Ernesto Valverde asediaron la meta de los franceses.

Todo se decidirá en el Camp Nou, en un partido en el que a los azulgranas les faltó precisión y puntería. Mereció más el conjunto catalán, pero el Lyon, un equipo alegre, también tuvo sus opciones, especialmente en el primer tiempo.


Advirtió a su equipo de que tenía que salir con la guardia alta y Ernesto Valverde mandó una señal desde la alineación. Puso a Sergi Roberto como centrocampista, en lugar de Arturo Vidal, y el Barcelona jugó con su esencia, a controlar el partido, presionando arriba y a forzar las pérdidas del rival.

Pero el Lyon es uno de los representantes de los jóvenes equipos europeos, un Ajax a la francesa, un conjunto con una baja media de edad y que por lo tanto juega con descaro, sin miedos, tiene recursos y es capaz de ponerle las cosas difíciles a cualquiera, como demostró hoy con el Barça.



De hecho, las dos primeras acciones fueron dos jugadas claras para los de Bruno Genesio: un remate de Houssem Aouar (min. 5) y sobre todo otro de Martin Terrier (min. 9), que dio en el travesaño, tras sendas intervenciones de Ter Stegen.

El Barcelona adelantó sus líneas y presionó muy arriba al rival. Buscaba forzar el error, cocer su fútbol a fuego lento, sin prisas. Messi miraba las diagonales a su izquierda para Alba y Dembélé, Sergi Roberto apoyaba a Semedo por la banda derecha y Busquets ejercía de metrónomo.



Pese a que le fallaba la precisión (2/13 en el primer tiempo), los de Valverde apuntaron con remates de Messi, Rakitic y Dembélé, pero a los azulgranas les faltaba afinar y el rival tenía cada vez menos el balón.


El grito de gol se ahogó en Anfield

El Bayern Múnich logró un valioso empate (0-0) en campo del Liverpool, este martes en el partido de ida de octavos de final de la Liga de Campeones, aunque sigue son ganar en Anfield.

El Bayern apostó por dar la iniciativa al Liverpool. El técnico del equipo inglés, Jurgen Klopp, apostó por un 4-3-3, con Mohamed Salah, Roberto Firmino y Sadio Mané en punta.

El Bayern Múnich, por su parte, decidió dejar un poco más solo a Robert Lewandowski en ataque, aunque respaldado unos metros más atrás por James Rodríguez, Kingsley Coman y Serge Gnabry.

Los españoles Thiago Alcántara y Javi Martínez apoyaban en la medular a esos jugadores de mayor corte ofensivo.

Pero los Reds, a los que el público de Anfield llevaba en volandas, dominaron casi toda la primera parte, con ocasiones de Salah, por partida doble, Mané, Naby Keita y Joel Matip.

La peor noticia para el Bayern fue que su lateral derecho, Joshua Kimmich, recibió una tarjeta amarilla mediada la primera parte, que le hará perderse el partido de vuelta con el Bayern en Múnich, el 13 de marzo.

El Bayern asistía impotente a las continuas llegadas del Liverpool, en las que Firmino aparecía como invitado de las acciones peligrosas de sus compañeros, ya que se dejó ver poco el brasileño.

El equipo alemán, por su parte, apenas inquietó, con un Lewandowski apagado, llevando peligro en solo dos acciones que protagonizaron Coman y Gnabry.

El Barça dejó vivo al Lyon en la ida de los octavos de final de la 'Champions' (0-0) y evidenció su falta de gol frente a un rival que plantó cara en el primer tiempo, pero que estuvo a merced de los azulgranas en el segundo, cuando los de Ernesto Valverde asediaron la meta de los franceses.

Todo se decidirá en el Camp Nou, en un partido en el que a los azulgranas les faltó precisión y puntería. Mereció más el conjunto catalán, pero el Lyon, un equipo alegre, también tuvo sus opciones, especialmente en el primer tiempo.


Advirtió a su equipo de que tenía que salir con la guardia alta y Ernesto Valverde mandó una señal desde la alineación. Puso a Sergi Roberto como centrocampista, en lugar de Arturo Vidal, y el Barcelona jugó con su esencia, a controlar el partido, presionando arriba y a forzar las pérdidas del rival.

Pero el Lyon es uno de los representantes de los jóvenes equipos europeos, un Ajax a la francesa, un conjunto con una baja media de edad y que por lo tanto juega con descaro, sin miedos, tiene recursos y es capaz de ponerle las cosas difíciles a cualquiera, como demostró hoy con el Barça.



De hecho, las dos primeras acciones fueron dos jugadas claras para los de Bruno Genesio: un remate de Houssem Aouar (min. 5) y sobre todo otro de Martin Terrier (min. 9), que dio en el travesaño, tras sendas intervenciones de Ter Stegen.

El Barcelona adelantó sus líneas y presionó muy arriba al rival. Buscaba forzar el error, cocer su fútbol a fuego lento, sin prisas. Messi miraba las diagonales a su izquierda para Alba y Dembélé, Sergi Roberto apoyaba a Semedo por la banda derecha y Busquets ejercía de metrónomo.



Pese a que le fallaba la precisión (2/13 en el primer tiempo), los de Valverde apuntaron con remates de Messi, Rakitic y Dembélé, pero a los azulgranas les faltaba afinar y el rival tenía cada vez menos el balón.


El grito de gol se ahogó en Anfield

El Bayern Múnich logró un valioso empate (0-0) en campo del Liverpool, este martes en el partido de ida de octavos de final de la Liga de Campeones, aunque sigue son ganar en Anfield.

El Bayern apostó por dar la iniciativa al Liverpool. El técnico del equipo inglés, Jurgen Klopp, apostó por un 4-3-3, con Mohamed Salah, Roberto Firmino y Sadio Mané en punta.

El Bayern Múnich, por su parte, decidió dejar un poco más solo a Robert Lewandowski en ataque, aunque respaldado unos metros más atrás por James Rodríguez, Kingsley Coman y Serge Gnabry.

Los españoles Thiago Alcántara y Javi Martínez apoyaban en la medular a esos jugadores de mayor corte ofensivo.

Pero los Reds, a los que el público de Anfield llevaba en volandas, dominaron casi toda la primera parte, con ocasiones de Salah, por partida doble, Mané, Naby Keita y Joel Matip.

La peor noticia para el Bayern fue que su lateral derecho, Joshua Kimmich, recibió una tarjeta amarilla mediada la primera parte, que le hará perderse el partido de vuelta con el Bayern en Múnich, el 13 de marzo.

El Bayern asistía impotente a las continuas llegadas del Liverpool, en las que Firmino aparecía como invitado de las acciones peligrosas de sus compañeros, ya que se dejó ver poco el brasileño.

El equipo alemán, por su parte, apenas inquietó, con un Lewandowski apagado, llevando peligro en solo dos acciones que protagonizaron Coman y Gnabry.

Estado

Piden a AMLO promover tregua delincuencial en todo el país

Activistas buscadores de desaparecidos hicieron el llamado para que el presidente promueva pactos que eviten que se registren más muertes

Doble Vía

Niños de La Montaña portan uniformes de invaluable valor

Con sus huipiles y guayaberas hechos totalmente a mano, niños y niñas de la comunidad de Valle Hermoso, en el municipio de Metlatónoc, portan con orgullo sus uniformes de invaluable valor artesanal

Doble Vía

¡Que no te engañen! Así puedes identificar las escuelas “patito”

Con el fin de alertar a estudiantes, la Secretaría de Educación lanzó una serie de recomendaciones para evitar que se inscriban en escuelas “patito”

Policiaca

Fiscalía investiga presunta irrupción de Los Tlacos en Coyuca de Benítez

La Fiscalía de Guerrero investiga el robo de un vehículo a maestros en la sierra de Coyuca de Benítez por parte de hombres armados que dijeron ser parte de Los Tlacos

Policiaca

Asesinan a balazos a empresario en zona conurbada de Acapulco

El empresario Ricardo Santiago Brito fue asesinado por civiles armados cuando comía en una fonda ubicada en la zona conurbada de Acapulco

Estado

Escuela en Chilpancingo recula en prohibición de lavarse las manos

El "Centro Escolar Chilpancingo" reculó la decisión de prohibir a los alumnos lavarse las manos por la falta de agua; los directivos explicaron que el problema es el abasto