Sin que sea considerado el llamado como “apología a la violencia”, en Chiapas la ciudadanía ha dado a su Gobernador la calificación a su gobierno: lo ha reprobado. Y para mostrarle su repudio piden que éste lunes, en cada municipio, y en sobre todo en Tuxtla, la Capital, lleve cada uno una piedra...
“Traición al pueblo” es el delito que le imputa la ciudadanía a su Senador, que es también el Gobernador Constitucional con licencia, y que pedirá licencia al Senado para regresar a “su” estado y protestar como Mandatario para concluir el 8 de diciembre el periodo por el que fue electo.
Para no estar fuera de la ley, el Gobernador con licencia y Senador de la República por Chiapas, Manuel Velasco Coello, envió reformas al Congreso de su estado para que fueran, no revisadas, sino aprobadas, y permitir con esas modificaciones hacer lo que está haciendo: ser Gobernador, pedir licencia, rendir protesta como Senador -pedir licencia al cargo- regresar a Chiapas a concluir su periodo y después regresar al Senado.
Pero esas acciones, y las que derivaron en rechazo ciudadano a su figura, no son gratuitos.
En su ejercicio de gobierno se habló de la injerencia de su familia en su gobierno. Especialmente la que tuvo su progenitora. No sólo por el señalamiento de enriquecimiento no comprobable –ni que fueran tontos- sino por lo que se les atribuye en el territorio, desde el desvío de la corriente de agua que estaba dejando a las lagunas de Montebello sin su belleza natural y que denunciaron los ejidatarios hasta que trascendió más allá de las fronteras chiapanecas y, mágicamente, las cascadas de Montebello volvieron a su esplendor y el Parque Nacional volvió a tener visitantes. Entre otros muchos señalamientos hacia el joven gobernador, y en su momento, una promesa de nuevos cuadros políticos.
Pero el Gobernador no consideró que la opinión ciudadana tenía peso y valor. Hasta que les impidieron la entrada a algunos puntos del estado.
Y hasta que subieron de tono las negativas a recibirlo.
El Gobernador que cacheteó en el inicio de su gobierno a un joven colaborador, mostró en ese momento que asumía la investidura con amplio poder, faltando incluso al respeto a su equipo, y consideró que podía ser no solo el Candidato de su Partido –PVEM- a la Presidencia de la República, sino el sucesor de Peña Nieto y que la alianza de ambos partidos –PRI y PVEM- debía darles desde la gubernatura las posibilidades de una competencia de igual a igual.
Cuando no recae en él esta posición no solo desdeña alianzas en su estado con el PRI, sino que en una “visita” al Presidente Peña se dice desairó la recomendación para el sucesor en su estado, y se habló ampliamente en Chiapas de su apoyo al hoy Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, más desde su posición de Presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores. Tal vez el único movimiento que salva su vida política, por el momento.
Hoy lunes se convoca a las y los chiapanecos a las 5 de la tarde “a hacer la cadena humana y clausurar los recintos del Poder Ejecutivo y Legislativo por traición al pueblo (y convocan) lleva tu manta, cartulina, tus consignas, tu voz, tu digna rabia”. Pero también el escultor Robertoni Gómez convoca a llevar una piedra donde se inscriba el calificativo al Senador que quiere regresar esta semana como gobernante del que dicen es “el peor gobernante que ha tenido Chiapas” ...hará con las piedras una escultura, con la que se erigirá el monumento que recordará a este personaje. Un mensaje de la calificación ciudadana a los gobernantes desde Chiapas para toda la República.
