El camino rumbo a las elecciones presidenciales del 2024 está lleno de baches y desviaciones, amenazas de choques y separaciones. En las tres trincheras, hay barruntos de tormenta que indican que al parecer no saldrán unidos a la batalla final, aunque hay una serie de cargos que pueden ser motivo de negociación entre los actores estos no garantizan la cohesión hasta el momento de la elección.
En el caso de Morena que es el partido en el poder, el camino a la selección del coordinador de algo que no se sabe que es, pero que en realidad es quien será ungido como candidato a la presidencia. Las cosas se complicaron cuando Marcelo Ebrard denunció acarreo y pago de encuestas a favor de Claudia Sheinbaum, según su afirmación presentó pruebas al respecto que la dirigencia del partido ha desestimado. Esto entre los candidatos punteros.
Mientras que en los rezagados, una operadora estatal de la Secretaría del Bienestar en Baja California que también es operadora de Adán Augusto López, fue destituida del cargo por presionar a un simpatizante de Claudia con retirarle el apoyo gubernamental si no se alineaba. En tanto que Gerardo Fernández Noroña acusa a la Comisión de Encuestas de Morena de parcialidad a favor de la ex Jefa de Gobierno y favorita presidencial.
Por otro lado, el intento de un exhorto a la unidad de Morena mostró la división partidista, legisladores de ese partido partidarios de Sheinbaum luego de las denuncias de Ebrard impulsaron un llamado a la unidad lo cual evidenció la división porque los partidarios de Ebrard, de Monreal y Adán Augusto Hernández, se negaron a suscribirlo.
En el caso del Frente Amplio por México a pesar de que Santiago Creel declinó a favor de Xóchitl Gálvez para que la selección de la candidata se decantara por la mencionada y por Beatriz Paredes. No obstante, las cosas no pintan tan halagüeñas para el frente, ni para Gálvez. Porque el procedimiento acordado tiene que seguir según lo planeado, a pesar de que la senadora priista está recibiendo presiones diarias en las redes para que decline a favor de Gálvez. Por su parte, la senadora panista originaria de Hidalgo enfrenta demandas penales de morenistas, con la intención de descarrilarla.
Sin duda fue el presidente Andrés Manuel López Obrador quien colocó los reflectores y la impulsó en la contienda presidencial y lo continúa haciendo, repitiendo las fórmulas que empleó contra él Vicente Fox, de intentarlo desaforar. También es López Obrador la que intenta descalificarla.
En otra trinchera, que es la de Movimiento Ciudadano, quien se ha intentado mantener al margen en la contienda, por la decisión de su líder nacional Dante Delgado, pero topó con pared con la protesta por lo mismo del gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, con quien se han alineado senadores, diputados federales, locales y alcaldes de esa entidad, exigiendo al presidente nacional de MC una definición en torno a la elección del 2024.
Delgado había venido ganando tiempo mencionando como posibles aspirantes al gobernador de Nuevo León, Samuel García, y al alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, que por su parte han señalado que no están interesados en la contienda. La otra opción que se ha manejado es el posible rompimiento de Ebrard con Morena y con ello ser el aspirante del partido naranja.
En México hay un sistema partidista muy fuerte, aunque por el momento los partidos opositores al gobierno estén muy debilitados por el comportamiento de la burocracia cupular. Cualquiera de quienes aspiran a la candidatura presidencial requiere de estructuras partidistas que le ayuden, tanto a la promoción del voto como a la vigilancia de las urnas, todo un trabajo operativo que un aspirante independiente no contará aun cuando tenga muchos simpatizantes.
Otro elemento discordante en este proceso es la constante intromisión del presidente López Obrador, reclamando su derecho a la libertad de expresión, pero dando línea electoral; en una actitud que tuvo también en su momento de presidente Vicente Fox a quien López Obrador le espetó la dura expresión: “Cállate chachalaca”.
Así a pesar del tiempo que pasa, para unos falta mucho y para otros muy poco, todos los que se encuentran afanosos trabajando para el 2024 están comenzando en un lado, pero quién sabe de qué lado de los tres frentes aquí mencionados terminen. Porque este camino está muy intrincado.