/ lunes 6 de septiembre de 2021

Mujeres indígenas, custodias

En el contexto de la conmemoración del Día de la Mujer Indígena , instituida desde 1983 durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América, realizado en Tlahuanacu, Bolivia, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheibaum, anunció que en el lugar donde se encuentra el monumento a Cristóbal Colón , se colocará una estatua en honor a las mujeres indígenas del país.

“La iniciativa provino del Senado que aprobó un punto de acuerdo en el que pedían la reubicación del Monumento a Colón y que fuera reemplazado por una escultura dedicada a la mujer indígena”, dijo la Jefa de Gobierno.

Y no es mala idea si consideramos que las mujeres indígenas son las custodias de las tradiciones, de la misma resistencia, y que su trabajo sostiene el desarrollo social, cultural, y hasta económico de sus comunidades.

Esta acción se convertirá en una reivindicación al legítimo derecho que tienen de que sea reconocida su existencia y su aportación , ya que son las más marginadas dentro de la estructura comunitaria de las regiones indígenas donde su limitación su participación fuera del entorno del hogar.

Una escultura, en un paseo en honor a la emperatriz Carlota, pero borrada, y donde la presencia masculina en las esculturas domina Reforma, visibilizará a la mujer indígena y se podría impulsar una nueva percepción de su condición y aportación.

De su condición ya que si se les reconoce que en su trabajo está el ser custodias de los saberes de sus pueblos , se pueden crear marcos legales para que puedan superar las condiciones de marginación, pobreza, violencia.

Las mujeres indígenas poco a poco han reconocido que para superar su condición de vulnerabilidad una de sus limitantes está en sus miedos “a romper la estructura patriarcal” de la estructura patriarcal que las han limitado y que una cultura predominante machista les ha negado la oportunidad de decidir y que les ha limitado hasta en la expresión con el uso de la palabra que es un derecho irrenunciable.

Por eso en las comunidades indígenas las mujeres han empezado a organizarse , a dar valor a lo que hacen, aunque de manera lenta, pero un ejemplo lo encontramos en las artesanías que realizan.

Pero aún falta descargar de sus hombros responsabilidades que menguan su salud, ya que en ellas recaen no solo las tareas de la reproducción, del cuidado y manutención de sus hijas e hijos, de la alimentación, de las tareas del hogar, a las que se suma apoyar a sus parejas en las tareas del campo y del cuidado de animales de traspatio, lo que la lleva a tener un tiempo limitado para dedicarlo a ellas.

Ojalá la escultura que se colocará implicave elementos que reconstruir también la imagen de la mujer indígena.

No se trata solo de mostrarlas, sino de demostrarles que se puede reconstruir su imagen reconociendo su valor y respetándolas.

En el contexto de la conmemoración del Día de la Mujer Indígena , instituida desde 1983 durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos de América, realizado en Tlahuanacu, Bolivia, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheibaum, anunció que en el lugar donde se encuentra el monumento a Cristóbal Colón , se colocará una estatua en honor a las mujeres indígenas del país.

“La iniciativa provino del Senado que aprobó un punto de acuerdo en el que pedían la reubicación del Monumento a Colón y que fuera reemplazado por una escultura dedicada a la mujer indígena”, dijo la Jefa de Gobierno.

Y no es mala idea si consideramos que las mujeres indígenas son las custodias de las tradiciones, de la misma resistencia, y que su trabajo sostiene el desarrollo social, cultural, y hasta económico de sus comunidades.

Esta acción se convertirá en una reivindicación al legítimo derecho que tienen de que sea reconocida su existencia y su aportación , ya que son las más marginadas dentro de la estructura comunitaria de las regiones indígenas donde su limitación su participación fuera del entorno del hogar.

Una escultura, en un paseo en honor a la emperatriz Carlota, pero borrada, y donde la presencia masculina en las esculturas domina Reforma, visibilizará a la mujer indígena y se podría impulsar una nueva percepción de su condición y aportación.

De su condición ya que si se les reconoce que en su trabajo está el ser custodias de los saberes de sus pueblos , se pueden crear marcos legales para que puedan superar las condiciones de marginación, pobreza, violencia.

Las mujeres indígenas poco a poco han reconocido que para superar su condición de vulnerabilidad una de sus limitantes está en sus miedos “a romper la estructura patriarcal” de la estructura patriarcal que las han limitado y que una cultura predominante machista les ha negado la oportunidad de decidir y que les ha limitado hasta en la expresión con el uso de la palabra que es un derecho irrenunciable.

Por eso en las comunidades indígenas las mujeres han empezado a organizarse , a dar valor a lo que hacen, aunque de manera lenta, pero un ejemplo lo encontramos en las artesanías que realizan.

Pero aún falta descargar de sus hombros responsabilidades que menguan su salud, ya que en ellas recaen no solo las tareas de la reproducción, del cuidado y manutención de sus hijas e hijos, de la alimentación, de las tareas del hogar, a las que se suma apoyar a sus parejas en las tareas del campo y del cuidado de animales de traspatio, lo que la lleva a tener un tiempo limitado para dedicarlo a ellas.

Ojalá la escultura que se colocará implicave elementos que reconstruir también la imagen de la mujer indígena.

No se trata solo de mostrarlas, sino de demostrarles que se puede reconstruir su imagen reconociendo su valor y respetándolas.