/ lunes 8 de marzo de 2021

Mujeres 2021

Cuando el 15 de febrero de 2020 encuentran a la pequeña Fátima, de 7 años, ya había muerto, había sido asesinada. Y de acuerdo a trascendidos la violencia estaba marcado en su pequeño cuerpecito. Antes de ella, otra mujer había indignado a las mujeres, a las feministas y las habría llevado a movilizarse para pedir justicia para ella, para ellas, para todos los feminicidios.

Los primeros días del 2020 el Fiscal General de la República, Alejandro Gerts Manero, quería desaparecer la figura de feminicidio del código penal. Quería que se ubicaran en el contexto de homicidios. Fue al Congreso Federal para convencer de las razones que lo llevaron. La realidad, que no ven, lo hizo en pocos días salir a decir que NUNCA lo había propuesto.

Pero las calles, ya estaban con marchas pidiendo al Presidente audiencia para ser escuchadas. La respuesta fue contundente y marcó la forma: manifiéstense pero no rayen las puertas. Sí al Presidente le dolían las puertas. Entonces, le dolían los edificios que, aunque históricos y representativos, no dejaban de ser piedras…y las mujeres? Y claro! Marcó la línea.

En una inimaginable escena, no para éste país de libertades, no para este país que ha conquistado derechos, este marzo de 2021, previo a la gran movilización convocada para Conmemorar el Día Internacional de la Mujer, una valla gris protege al Presidente que está dentro de Palacio Nacional, y tras esa valla otra más que aleja el dialogo.

La historia de lucha de las mujeres es una historia de muchos años y formas que han ido venciendo hasta la propia resistencia de otras mujeres que se han sumado y han asumido la lucha para conquistar y defender derechos.

En Guerrero iniciaba la década de los 90’s cuando un grupo de mujeres salimos a protestar para exigir un alto a la violencia, a través del Movimiento Femenil de lucha contra la violencia. Después se convertiría en el MOSOVIS, Movimiento de Solidaridad Contra la Violencia Sexual.

No fue fácil. Hubo que convencer, primero el tema de lo que unía entre las diferencias de las mujeres políticas. Después hubo que impulsar propuestas. Era Gobernador José Francisco Ruíz Massieu, Edil de Acapulco René Juárez Cisneros. Hubo empatía con el movimiento y la lucha, y se dieron resultados.

Tras el paro de mujeres el 9 de marzo de 2020 se mostró, con la ausencia de las mujeres de toda la vida social, laboral, política, etc., que la sociedad no puede caminar en un solo pie, el masculino, que tiene que trabajar con las bases necesarias donde mujeres y varones podemos construir juntas y juntos, nuevas formas de respeto.

Que pena que la reacción del gobierno que impulsó una lucha desde la izquierda haya hecho de lado a las mujeres. Que pena que no escuche su voz ni sus propuestas. Que pena que no crea en su palabra. Que pena por todas nosotras y nosotros, mujeres y varones feministas, que aún tenemos que caminar para vencer esa resistencia y abrir una nueva etapa…aunque sea así, en las calles y con lucha.

Cuando el 15 de febrero de 2020 encuentran a la pequeña Fátima, de 7 años, ya había muerto, había sido asesinada. Y de acuerdo a trascendidos la violencia estaba marcado en su pequeño cuerpecito. Antes de ella, otra mujer había indignado a las mujeres, a las feministas y las habría llevado a movilizarse para pedir justicia para ella, para ellas, para todos los feminicidios.

Los primeros días del 2020 el Fiscal General de la República, Alejandro Gerts Manero, quería desaparecer la figura de feminicidio del código penal. Quería que se ubicaran en el contexto de homicidios. Fue al Congreso Federal para convencer de las razones que lo llevaron. La realidad, que no ven, lo hizo en pocos días salir a decir que NUNCA lo había propuesto.

Pero las calles, ya estaban con marchas pidiendo al Presidente audiencia para ser escuchadas. La respuesta fue contundente y marcó la forma: manifiéstense pero no rayen las puertas. Sí al Presidente le dolían las puertas. Entonces, le dolían los edificios que, aunque históricos y representativos, no dejaban de ser piedras…y las mujeres? Y claro! Marcó la línea.

En una inimaginable escena, no para éste país de libertades, no para este país que ha conquistado derechos, este marzo de 2021, previo a la gran movilización convocada para Conmemorar el Día Internacional de la Mujer, una valla gris protege al Presidente que está dentro de Palacio Nacional, y tras esa valla otra más que aleja el dialogo.

La historia de lucha de las mujeres es una historia de muchos años y formas que han ido venciendo hasta la propia resistencia de otras mujeres que se han sumado y han asumido la lucha para conquistar y defender derechos.

En Guerrero iniciaba la década de los 90’s cuando un grupo de mujeres salimos a protestar para exigir un alto a la violencia, a través del Movimiento Femenil de lucha contra la violencia. Después se convertiría en el MOSOVIS, Movimiento de Solidaridad Contra la Violencia Sexual.

No fue fácil. Hubo que convencer, primero el tema de lo que unía entre las diferencias de las mujeres políticas. Después hubo que impulsar propuestas. Era Gobernador José Francisco Ruíz Massieu, Edil de Acapulco René Juárez Cisneros. Hubo empatía con el movimiento y la lucha, y se dieron resultados.

Tras el paro de mujeres el 9 de marzo de 2020 se mostró, con la ausencia de las mujeres de toda la vida social, laboral, política, etc., que la sociedad no puede caminar en un solo pie, el masculino, que tiene que trabajar con las bases necesarias donde mujeres y varones podemos construir juntas y juntos, nuevas formas de respeto.

Que pena que la reacción del gobierno que impulsó una lucha desde la izquierda haya hecho de lado a las mujeres. Que pena que no escuche su voz ni sus propuestas. Que pena que no crea en su palabra. Que pena por todas nosotras y nosotros, mujeres y varones feministas, que aún tenemos que caminar para vencer esa resistencia y abrir una nueva etapa…aunque sea así, en las calles y con lucha.