Et tu, Brute?
La traición es parte de la naturaleza de algunos seres humanos; los traidores siempre son y lo hacen a conveniencia, nadie se escapa de ser traicionado e inclusive de traicionar (o al menos de la interpretación de acuerdo al sentir de otros). Los ejemplos a lo largo de la historia y la vida misma, sobran, y en política son parte de la esencia del político y gobernante.
En el pasado presente vimos cómo fueron al cadalso los diputados que se opusieron a cambiar la reforma eléctrica a capricho y orden presidencial, se les llamó traidores a la Patria e inclusive se inició una campaña de señalamiento con carteles que daban la impresión de poner precio por su vida (como en el viejo Oeste) , y hoy en Guerrero hay un señalamiento en contra de los diputados de Morena quienes votaron en contra de etiquetar recursos para Acapulco tras el paso y devastación del huracán Otis; a veces la política agarra el "ojo por ojo", otras veces es parte del karma y esto sería el ejemplo.
Otro ejemplo reciente de lo que es la traición en política, es Claudia Sheinbaum y porque ella haya cometido traición (ya vendrá su oportunidad de hacerlo) recibió el bastón de mando sin mando alguno; lo presumió y hasta intento usarlo y cuando despertó a la realidad, ya tenía una puñalada trasera ó cómo se define el hecho de que su alfil y candidato a la CDMX fuera dejado fuera y le impusieran a quien era la elegida del Gran dedo elector en MORENA, pero bueno la sumisión es cualidad necesaria para estar en las querencias del Lópezobradorismo y si no, hay que voltear a ver a Marcelo Ebrard.
Hablemos de Acapulco, hablemos de la traición a los acapulqueños, hablemos del huracán Otis, el cual con sus vientos superiores a los trescientos kilómetros por hora devastó al municipio más importante de Guerrero (hay más municipios afectados). Acapulco es parte importante del ingreso económico para el Estado y del cual dependen otros más.
El abandono y la orden de inamovilidad de las fuerzas armadas fomentaron por inacción y omisión el saqueo indiscriminado. Los tres niveles de Gobierno fueron cómplices y simples espectadores de ello. Otis como desastre natural desnudó y sacó a la luz a la naturaleza humana y a la delincuencia a las calles, unos a ser solidarios, y a otros a la rapiña.
El "no nos fue tan mal" expresado por Andrés Manuel López Obrador, es la muestra de su poco interés por la vida humana y sobre todo de su falta de empatía. La foto de atasco en el lodazal demuestra y dice mucho, abandono a los guerrerenses y se fue para el norte. Afortunadamente la sociedad civil mexicana y organizaciones como Cruz Roja y World Central Kitchen suplieron en mucho a la inacción gubernamental.
A López Obrador le cayó como anillo al dedo la desgracia de los acapulqueños y guerrerenses de municipios aledaños para hacer su trabajo electoral permanente y lo resumió con la soberbia de sus palabras "en Acapulco siempre gano". El beneficio será electoral por la vía del lavado de dinero al dar muchos apoyos en efectivo y manejar a su conveniencia política el monto final de lo que el dirá se gastó en está emergencia (al final la opacidad será por " Seguridad Nacional "). Podemos decir que el mito de la Cuarta Transformación es en esencia una...Traición
PD. Todo México debe de repetir el " ACUERDATE DE ACAPULCO " Como un recordatorio de la exigencia de una gobernanza responsable y cómo una constante para que recordemos que nuestro votó definirá el destino y el futuro de México.
