El sábado 16 de Agosto hubo una jornada de protesta a nivel mundial de los venezolanos que piden reconocer la derrota de Nicolas Maduro en las pasadas elecciones, asimismo exigen la presentación de las actas electorales, en su presentación pública durante uno de lo mitines Corina Machado fue tajante y habló fuerte “échenle bolas” frase que puede tener mucho significado, de aliento, de reto y de lucha, hay quienes ven un proceso electoral largo, otros esperan intervención de la comunidad internacional y hasta la detención de Maduro y su plana mayor, la retórica oficialista habla de golpe de Estado y hasta injerencia del exterior, se pide que se ejecute una orden de captura una vez que la Corte Internacional lo declare indiciado como culpable de delitos de lesa humanidad en contra de sus conciudadanos.
El “échenle bolas” queda ad hoc a la realidad de la oposición mexicana, ya pasaron la elecciones y el partido ganador ahora quiere todo el poder legislativo a como dé lugar, no gana los porcentajes, pero los quiere arrebatar, creen que el número de votos a la presidencia les otorga la sobrerepresentación absoluta, así sin más, todo el poder y la Constitución y hasta la ciudadanía al ¡carajo!, al final de cuentas se trata de tener la dictadura perfecta o cuasi (aquí podemos reflejarnos en la Venezuela de Maduro) perfecta, la política corruptora de López Obrador ya se apropio del INE y del TEPJF y pretende atropellar (secuestrar) al poder legislativo, le urge consumar su revancha y venganza política pisoteando pa ello a la propia constitución mexicana.
La oposición política, queda en el limbo, los partidos están minimizados y uno desapareció tras la elección del 2 de Junio.
No hay liderazgo que la encabece, las dirigencias del PAN y el PRI están en conflicto interno, grandes diferencias a zanjar, agandalles y encontronazos entre sus “notables” y la militancia olvidada, militancia que optó por la venta de su voto, aparte del valor económico en efectivo que se les otorgó, los partidos las dejaron en el olvido, difícil recuperarlas cuando aparte de la Desatención de sus líderes políticos, los programas sociales vía dinero sin esfuerzo, los obliga a vender su ideología y simpatía.
Se espera que ahora llamado Frente Cívico Nacional haga que la ciudadanía inconforme se aglutine para conformar una nueva opción política que sume a las “militancias abandonadas, olvidadas y arrinconadas” su disyuntiva es saber si lograrán amalgama a los sin partido con los militantes que desean ser tomados en cuenta sin tener fierros o colores que los señalen y los marginen, ¿lograrán hacerlo?, habrá que ver, ya que hay mucha orfandad Política, de entrada deben encontrar como darle origen y destino ideológico, la tardanza en hacerlo, los pone en la vía de la desilusión sobre un proyecto político que genere una opción política que realmente sea oposición.
El cierre de sexenio es una buena opción para demostrar oposición y evitar la sobrerepresentación y la instalación de un legislativo sometido al autoritarismo del ejecutivo, hay tiempo para demostrar que hay organización que genere una forma de protesta política que haga pensar al autócrata de Palacio y a su heredera, la movilización política social es la que genera el equilibrio qué evita el vacío y el abuso del poder y aquí vale decir “échenle. bolas”… No se hagan Bolas.
PD. Y cuanta razón tenía José Francisco Ruiz Massieu “O CAMBIAMOS O NOS CAMBIAN” y todo mundo pensó que se refería nada más al PRI y hoy cobra vigencia e importancia su dicho