/ viernes 9 de marzo de 2018

Falcotitlán

El lunes 5 de marzo se celebra el Día Mundial de la Eficiencia Energética, y México se encuentra en un penoso séptimo sitio, en un ranking de 111 países. Sin embargo, estamos en el top en América Latina con la aplicación de programas en ese rubro. La Comisión Europea y la Organización de las Naciones Unidas difunden los beneficios que trae en la economía, la cultura y el medio ambiente, el ser eficientes al usar la energía en la sociedad. Contaminar menos y ahorrar más, se interpreta en sumarle más tiempo a nuestro hábitat. Desde 1998 se pregonó en Austria la primera conferencia internacional de Eficiencia Energética. La crisis de cómo y dónde vivir, ha sido un clamor para pocos interesados en el tema. La implantación de la norma ISO 50001, permite a las organizaciones y entidades mejorar la eficiencia energética de sus procesos de forma sistemática. Pero está quedando al margen por el gobierno.

En México, las autoridades, dicho sea de paso, los senadores, legisladores, regidores y secretarías, no comprenden la magnitud de por qué se debe cuidar el consumo y racionalizar la energía. No lo entienden,porque no implementan lo básico, que es desde el sistema educativo. Se comienza con la enseñanza y aprendizaje, por supuesto dada en el hogar y en las aulas. Pero también, se deben establecer, implementar, mantener y mejorar los sistemas de gestión energéticas de cada lugar.

Demostrar mediante la certificación la conformidad por un organismo externo. Las mejoras comerciales deben reflejarse en un aumento de la competitividad, nuevos mercados, reducción de costos, optimización del uso de recursos, disminución de la intensidad energética (consumo energético / PIB), y una prevención de esos costos con herramientas para facilitar el cometido de la Comisión Federal de Electricidad y Petróleos Mexicanos, en la implantación de actuaciones provenientes de auditorías energéticas. Pero no es así, todo lo que han hecho desde el simbólico acto del entonces presidente Lázaro Cárdenas del Río, me refiero a la expropiación petrolera en nuestro país, ha sido deteriorar la nacionalización de la industria petrolera, la cual fue el 18 de marzo de 1938. Ejecutando la Ley de Expropiación del año 1936 y del Artículo 27 de la Constitución Mexicana. Ante esta crisis, en nuestra nación se han efectuado acciones.

Se cuenta con 30 Normas Oficiales Mexicanas (NOM) de eficiencia energética vigentes, que aplican a más de 40 millones de aparatos utilizados en los hogares, comercios e industria; la normalización para la eficiencia energética ha resultado en ahorros de más de 600 mil millones de pesos a las familias y a la hacienda pública en los últimos 20 años; el programa de ahorro y uso eficiente de energía del gobierno federal ha mejorado la eficiencia energética en edificios, flotas vehiculares e instalaciones industriales; México tiene instituciones y programas de eficiencia energética que operan desde hace más de 25 años, que son referencia internacional; en la presente administración se han apoyado inversiones cercanas a novecientos millones de pesos en sistemas de alumbrado público municipal, con reducción promedio del consumo de energía de 38.3%; se financiaron 172 proyectos de eficiencia energética en empresas, por un monto de 152.81 MDP; se autorizaron ocho proyectos de generación y eficiencia térmica en empresas, en los que se comprometieron 7.75 MDP para su financiamiento; para garantizar la calidad técnica de los proyectos financiados, el FIDE cuenta con acreditaciones como Entidad de Certificación y Evaluación de Competencia Laborales en: Eficiencia Energética y Generación de Energías Limpias, e Instalación de Sistemas Fotovoltaicos en Residencia, Comercio e Industria.

La sustentabilidad es educar, concientizar más allá de cuidar el agua, la reforestación, limpiar los mares o llevar bebedores a escuelas. Invito a los lectores a que alcen la mano desde cualquier nicho. Energía, el Sol nos da una, el aire y el agua, sin mencionar las alternas, como lo inventado por Tesla. Usémoslas.

 www.falcotitlan.org

El lunes 5 de marzo se celebra el Día Mundial de la Eficiencia Energética, y México se encuentra en un penoso séptimo sitio, en un ranking de 111 países. Sin embargo, estamos en el top en América Latina con la aplicación de programas en ese rubro. La Comisión Europea y la Organización de las Naciones Unidas difunden los beneficios que trae en la economía, la cultura y el medio ambiente, el ser eficientes al usar la energía en la sociedad. Contaminar menos y ahorrar más, se interpreta en sumarle más tiempo a nuestro hábitat. Desde 1998 se pregonó en Austria la primera conferencia internacional de Eficiencia Energética. La crisis de cómo y dónde vivir, ha sido un clamor para pocos interesados en el tema. La implantación de la norma ISO 50001, permite a las organizaciones y entidades mejorar la eficiencia energética de sus procesos de forma sistemática. Pero está quedando al margen por el gobierno.

En México, las autoridades, dicho sea de paso, los senadores, legisladores, regidores y secretarías, no comprenden la magnitud de por qué se debe cuidar el consumo y racionalizar la energía. No lo entienden,porque no implementan lo básico, que es desde el sistema educativo. Se comienza con la enseñanza y aprendizaje, por supuesto dada en el hogar y en las aulas. Pero también, se deben establecer, implementar, mantener y mejorar los sistemas de gestión energéticas de cada lugar.

Demostrar mediante la certificación la conformidad por un organismo externo. Las mejoras comerciales deben reflejarse en un aumento de la competitividad, nuevos mercados, reducción de costos, optimización del uso de recursos, disminución de la intensidad energética (consumo energético / PIB), y una prevención de esos costos con herramientas para facilitar el cometido de la Comisión Federal de Electricidad y Petróleos Mexicanos, en la implantación de actuaciones provenientes de auditorías energéticas. Pero no es así, todo lo que han hecho desde el simbólico acto del entonces presidente Lázaro Cárdenas del Río, me refiero a la expropiación petrolera en nuestro país, ha sido deteriorar la nacionalización de la industria petrolera, la cual fue el 18 de marzo de 1938. Ejecutando la Ley de Expropiación del año 1936 y del Artículo 27 de la Constitución Mexicana. Ante esta crisis, en nuestra nación se han efectuado acciones.

Se cuenta con 30 Normas Oficiales Mexicanas (NOM) de eficiencia energética vigentes, que aplican a más de 40 millones de aparatos utilizados en los hogares, comercios e industria; la normalización para la eficiencia energética ha resultado en ahorros de más de 600 mil millones de pesos a las familias y a la hacienda pública en los últimos 20 años; el programa de ahorro y uso eficiente de energía del gobierno federal ha mejorado la eficiencia energética en edificios, flotas vehiculares e instalaciones industriales; México tiene instituciones y programas de eficiencia energética que operan desde hace más de 25 años, que son referencia internacional; en la presente administración se han apoyado inversiones cercanas a novecientos millones de pesos en sistemas de alumbrado público municipal, con reducción promedio del consumo de energía de 38.3%; se financiaron 172 proyectos de eficiencia energética en empresas, por un monto de 152.81 MDP; se autorizaron ocho proyectos de generación y eficiencia térmica en empresas, en los que se comprometieron 7.75 MDP para su financiamiento; para garantizar la calidad técnica de los proyectos financiados, el FIDE cuenta con acreditaciones como Entidad de Certificación y Evaluación de Competencia Laborales en: Eficiencia Energética y Generación de Energías Limpias, e Instalación de Sistemas Fotovoltaicos en Residencia, Comercio e Industria.

La sustentabilidad es educar, concientizar más allá de cuidar el agua, la reforestación, limpiar los mares o llevar bebedores a escuelas. Invito a los lectores a que alcen la mano desde cualquier nicho. Energía, el Sol nos da una, el aire y el agua, sin mencionar las alternas, como lo inventado por Tesla. Usémoslas.

 www.falcotitlan.org