/ jueves 13 de mayo de 2021

El Zoon Politikón de HAF

Ni duda cabe que tenemos en Héctor Astudillo Flores un político de tiempo completo y de carrera. Desde que asumió el control del estado como gobernador, hizo compromisos que en ese momento nadie creía los cumpliría.

El estado se encontraba posicionado en los primeros lugares de los homicidios a nivel nacional y no se veía la punta de la madeja.

Hoy en día el gobernador Héctor Astudillo Flores ha colocado al estado muy por debajo de la media nacional de homicidios por parte de la delincuencia organizada y aún así no está satisfecho.

Se sigue trabajando férreamente para seguir dando resultados en este grave problema que aqueja a todo el país.

Cuando Andrés Manuel Lopez Obrador llegó a la Presidencia y colocó como superdelegado del estado a Pablo Almicar Sandoval, fue notorio el afán protagónico de éste último al querer ponerle piedras en el camino al gobernador Héctor Astudillo, escondiendo la mano en sus acciones.

Sin embargo, apareció el Zoon Poltikón de Héctor Astudillo, quien astutamente le hizo vacío hasta lograr que la figura de aquel apareciera y se descubriera la mano que mecía la cuna de los actos en su contra.

Ahí está como ejemplo, aquel recibimiento al Presidente de la República a un municipio del estado con vivas y porras para él y abucheos y otras palabras altisonantes para el gobernador del estado.

Sin más, Héctor Astudillo sacó el “as” de la manga y con una frase lapidaria al presidente de la República dejó noqueado al entonces superdelegado: “ voy a analizar, detenidamente si volveré a acompañar al presidente a sus giras en el estado”.

Seguramente AMLO le jaló alguna parte del cuerpo (que no fueron las orejas) al tal Pablo Almicar Sandoval, que hasta la candidatura a gobernador le costó.

En la crisis de la pandemia, el gobernador Héctor Astudillo fue muy cuidadoso y mesurado, aún y cuando a nivel federal había un total desorden en el manejo de la pandemia y las recomendaciones.

Acá las cuentas siempre han sido claras aún y cuando algunas presidentas y presidentes municipales se le pusieron al tiro, el gobernador Héctor Astudillo los puso en su lugar y no le tembló la mano para cuidar la salud de la población tanto guerrerenses, como turistas y ordenó el cierre de playas y comercios.

Fue una decisión difícil pero necesaria, la cual hoy le reconocemos, pues el contagio y muertes disminuyeron considerablemente.

El programa de vacunación se está dando ordenado de acuerdo a la disponibilidad del producto a nivel nacional.

Por todo eso y mucho más, el gobernador del estado está colocado dentro de los tres primeros gobernantes mejor calificados.

Ya hacia falta tener a un político serio y eficaz en el manejo de crisis en el estado.

Ni duda cabe que tenemos en Héctor Astudillo Flores un político de tiempo completo y de carrera. Desde que asumió el control del estado como gobernador, hizo compromisos que en ese momento nadie creía los cumpliría.

El estado se encontraba posicionado en los primeros lugares de los homicidios a nivel nacional y no se veía la punta de la madeja.

Hoy en día el gobernador Héctor Astudillo Flores ha colocado al estado muy por debajo de la media nacional de homicidios por parte de la delincuencia organizada y aún así no está satisfecho.

Se sigue trabajando férreamente para seguir dando resultados en este grave problema que aqueja a todo el país.

Cuando Andrés Manuel Lopez Obrador llegó a la Presidencia y colocó como superdelegado del estado a Pablo Almicar Sandoval, fue notorio el afán protagónico de éste último al querer ponerle piedras en el camino al gobernador Héctor Astudillo, escondiendo la mano en sus acciones.

Sin embargo, apareció el Zoon Poltikón de Héctor Astudillo, quien astutamente le hizo vacío hasta lograr que la figura de aquel apareciera y se descubriera la mano que mecía la cuna de los actos en su contra.

Ahí está como ejemplo, aquel recibimiento al Presidente de la República a un municipio del estado con vivas y porras para él y abucheos y otras palabras altisonantes para el gobernador del estado.

Sin más, Héctor Astudillo sacó el “as” de la manga y con una frase lapidaria al presidente de la República dejó noqueado al entonces superdelegado: “ voy a analizar, detenidamente si volveré a acompañar al presidente a sus giras en el estado”.

Seguramente AMLO le jaló alguna parte del cuerpo (que no fueron las orejas) al tal Pablo Almicar Sandoval, que hasta la candidatura a gobernador le costó.

En la crisis de la pandemia, el gobernador Héctor Astudillo fue muy cuidadoso y mesurado, aún y cuando a nivel federal había un total desorden en el manejo de la pandemia y las recomendaciones.

Acá las cuentas siempre han sido claras aún y cuando algunas presidentas y presidentes municipales se le pusieron al tiro, el gobernador Héctor Astudillo los puso en su lugar y no le tembló la mano para cuidar la salud de la población tanto guerrerenses, como turistas y ordenó el cierre de playas y comercios.

Fue una decisión difícil pero necesaria, la cual hoy le reconocemos, pues el contagio y muertes disminuyeron considerablemente.

El programa de vacunación se está dando ordenado de acuerdo a la disponibilidad del producto a nivel nacional.

Por todo eso y mucho más, el gobernador del estado está colocado dentro de los tres primeros gobernantes mejor calificados.

Ya hacia falta tener a un político serio y eficaz en el manejo de crisis en el estado.