/ jueves 24 de marzo de 2022

El AIFA

No hay plazo que no se cumpla y la terminación del Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” llegó a su fin. El monstruo de concreto, acero y cristal es un hecho, gústele a quien le guste y al que no… ¡también!.

Que falta mucho por hacer, es verdad, pero se está trabajando en ello. Que está lejos de la CDMX, también es verdad, pero hay medios de transporte para ir, venir y más que seguramente se sumarán y reducirán el costo del peaje. Que no hay muchas líneas nacionales y extranjeras que estén prestando el servicio de transporte de pasajeros y carga, es correcto, pero el AIFA está empezando a funcionar y seguramente con el paso del tiempo se irán sumando mas vuelos.

Que es un riesgo su operatividad por la cercanía con el Aeropuerto “Benito Juárez” de la CDMX y el de Toluca, falso, se cuenta con los permisos de los organismos de la aviación nacionales e internacionales (OACI) que regulan la operatividad aeronáutica. Que están vacíos los locales comerciales y no hay qué comprar para comer o simplemente recuerdos. Ya los habrá. Mientras, hay tlayudas bien ricas.

Que los baños parecen de una central camionera por los dibujos de luchadores, ignorantes. La lucha libre es parte de la cultura mexicana reconocida en todo el mundo.

En fin, que “no hay chile que les embone” a los detractores. Lo cierto es que el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” ya está en función. En tanto el fallido proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM) se encuentra sumergido en las aguas y lodo del vaso del mismo nombre.

Por cierto, se declaró como área protegida el lago de Texcoco, donde no se permitirá construir ¡NADA!. No hay que ver no sólo lo malo que nos quisieron vender; lo positivo del AIFA es que dará empleo a cientos o miles personas en el Estado de México y permitirá la conectividad con los Estado de Hidalgo, CDMX y estados circunvecinos.

Que resultó mucho más caro que lo ofertado, no lo sé, pero de lo que estoy cierto es que no era posible hacer el NAIM en el lago de Texcoco donde constantemente tendría que hacerse reparaciones por el hundimiento del suelo que seguro habría con alto costo para el presupuesto, dinero mío, de usted y de todos.

Ahora bien, el AIFA no suplirá al aeropuerto de la CDMX, solo se complementará. En mi opinión se puede mandar al AIFA los vuelos de carga y algunos nacionales e internacionales, dependiendo de la demanda. Recordemos que el Estado de México tiene muchos millones de habitantes a quienes se les hace lejos ir a la CDMX para tomar un vuelo.

Asimismo los habitantes de Hidalgo y demás estados circunvecinos se verán beneficiados. Con esto, se aligerará el tráfico con el Aeropuerto Internacional “Benito Juárez” que estaba saturado. Así se resolvió el problema de saturación del Aeropuerto “Benito Juárez”, sin mayor daño al ecosistema.

No hay plazo que no se cumpla y la terminación del Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” llegó a su fin. El monstruo de concreto, acero y cristal es un hecho, gústele a quien le guste y al que no… ¡también!.

Que falta mucho por hacer, es verdad, pero se está trabajando en ello. Que está lejos de la CDMX, también es verdad, pero hay medios de transporte para ir, venir y más que seguramente se sumarán y reducirán el costo del peaje. Que no hay muchas líneas nacionales y extranjeras que estén prestando el servicio de transporte de pasajeros y carga, es correcto, pero el AIFA está empezando a funcionar y seguramente con el paso del tiempo se irán sumando mas vuelos.

Que es un riesgo su operatividad por la cercanía con el Aeropuerto “Benito Juárez” de la CDMX y el de Toluca, falso, se cuenta con los permisos de los organismos de la aviación nacionales e internacionales (OACI) que regulan la operatividad aeronáutica. Que están vacíos los locales comerciales y no hay qué comprar para comer o simplemente recuerdos. Ya los habrá. Mientras, hay tlayudas bien ricas.

Que los baños parecen de una central camionera por los dibujos de luchadores, ignorantes. La lucha libre es parte de la cultura mexicana reconocida en todo el mundo.

En fin, que “no hay chile que les embone” a los detractores. Lo cierto es que el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” ya está en función. En tanto el fallido proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM) se encuentra sumergido en las aguas y lodo del vaso del mismo nombre.

Por cierto, se declaró como área protegida el lago de Texcoco, donde no se permitirá construir ¡NADA!. No hay que ver no sólo lo malo que nos quisieron vender; lo positivo del AIFA es que dará empleo a cientos o miles personas en el Estado de México y permitirá la conectividad con los Estado de Hidalgo, CDMX y estados circunvecinos.

Que resultó mucho más caro que lo ofertado, no lo sé, pero de lo que estoy cierto es que no era posible hacer el NAIM en el lago de Texcoco donde constantemente tendría que hacerse reparaciones por el hundimiento del suelo que seguro habría con alto costo para el presupuesto, dinero mío, de usted y de todos.

Ahora bien, el AIFA no suplirá al aeropuerto de la CDMX, solo se complementará. En mi opinión se puede mandar al AIFA los vuelos de carga y algunos nacionales e internacionales, dependiendo de la demanda. Recordemos que el Estado de México tiene muchos millones de habitantes a quienes se les hace lejos ir a la CDMX para tomar un vuelo.

Asimismo los habitantes de Hidalgo y demás estados circunvecinos se verán beneficiados. Con esto, se aligerará el tráfico con el Aeropuerto Internacional “Benito Juárez” que estaba saturado. Así se resolvió el problema de saturación del Aeropuerto “Benito Juárez”, sin mayor daño al ecosistema.