/ martes 25 de enero de 2022

Asesinato de periodista en Tijuana

Este domingo fue privada de la vida la periodista Lourdes Maldonado . El hecho ha despertado no solo indignación, sino también incredulidad sobre qué es en la realidad el respeto a la libertad de expresión.

“Vengo a pedir ayuda, temo por mi vida” , fue una frase pronunciada por el periodista directamente al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en una conferencia matutina, donde además, expuso las circunstancias que la llevaron a considerar el riesgo que vivían y la necesidad de tener ayuda, proteccion.

Este domingo 23 de enero, después de exponer su temor y suplicar por ayuda al Mandatario Federal , en Palacio Nacional, en el Salón Tesorería, la periodista fue asesinada.

El trabajo periodístico de Lourdes da cuenta de un ejercicio , como el de muchos y muchos periodistas, activo, de investigación, de denuncia, de respeto, de claridad.

Cuando clamamos por justicia no le estamos regresando la vida a las y los periodistas asesinados , les estamos regresando su dignidad y el reconocimiento social que debemos protegerlos.

La sociedad y la clase política aún está en deuda con un gremio que da respuesta a los equilibrios necesarios para que una sociedad avance. La historia nos muestra que la ausencia de la comprensión de lo que significa el quehacer de la libertad de expresión conduce inexorablemente a crear escenarios oscuros donde se pierden garantías.

Cuando emana del poder la mano que cierra un medio o cierra una vida periodística con la vida o con la censura, no es una buena noticia para la sociedad.

Criminalizar a las y los periodistas debe ser una acción que se debe sancionar porque pone en riesgo su integridad física, su familia, su trabajo, y pone en riesgo el propio derecho a saber ya la expresión libre.

La periodista, tercera en el registro de periodistas que son privados de la vida en este primer mes de 2022 en el país, es un golpe contra todos y todos los que están, estamos, en esta labor y no tiene razón en un país donde se luchó por las libertades y se intenta confundir a la sociedad con discursos que intentan desestimar la opinión y la crítica.

Este domingo fue privada de la vida la periodista Lourdes Maldonado . El hecho ha despertado no solo indignación, sino también incredulidad sobre qué es en la realidad el respeto a la libertad de expresión.

“Vengo a pedir ayuda, temo por mi vida” , fue una frase pronunciada por el periodista directamente al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en una conferencia matutina, donde además, expuso las circunstancias que la llevaron a considerar el riesgo que vivían y la necesidad de tener ayuda, proteccion.

Este domingo 23 de enero, después de exponer su temor y suplicar por ayuda al Mandatario Federal , en Palacio Nacional, en el Salón Tesorería, la periodista fue asesinada.

El trabajo periodístico de Lourdes da cuenta de un ejercicio , como el de muchos y muchos periodistas, activo, de investigación, de denuncia, de respeto, de claridad.

Cuando clamamos por justicia no le estamos regresando la vida a las y los periodistas asesinados , les estamos regresando su dignidad y el reconocimiento social que debemos protegerlos.

La sociedad y la clase política aún está en deuda con un gremio que da respuesta a los equilibrios necesarios para que una sociedad avance. La historia nos muestra que la ausencia de la comprensión de lo que significa el quehacer de la libertad de expresión conduce inexorablemente a crear escenarios oscuros donde se pierden garantías.

Cuando emana del poder la mano que cierra un medio o cierra una vida periodística con la vida o con la censura, no es una buena noticia para la sociedad.

Criminalizar a las y los periodistas debe ser una acción que se debe sancionar porque pone en riesgo su integridad física, su familia, su trabajo, y pone en riesgo el propio derecho a saber ya la expresión libre.

La periodista, tercera en el registro de periodistas que son privados de la vida en este primer mes de 2022 en el país, es un golpe contra todos y todos los que están, estamos, en esta labor y no tiene razón en un país donde se luchó por las libertades y se intenta confundir a la sociedad con discursos que intentan desestimar la opinión y la crítica.