/ domingo 22 de octubre de 2023

Ágora | ¡La primera víctima de la guerra es la verdad!

La anterior frase se atribuye a varias personas por lo que no voy a señalar a ninguno en particular, pero tampoco me la voy a adjudicar como propia ( no vaya siendo que me acusen de plagio). Lo importante de la misma, es el hecho de que en estos tiempos de guerra en varios frentes, que amenaza con una conflagración mundial y con la tecnología actual como la inteligencia artificial, se puede transformar una mentira en una verdad por los líderes del mundo que tratan de dar una imagen de justicia cuando en realidad son los generadores de la violencia, en aras de sus propios intereses. Las imágenes que se proyectan pueden ser manipuladas a favor de quien se quiera - como se presenta en la película Wag the Dog donde el actor Dustin Hoffman interpreta a un cineasta que manipula escenas para construir una guerra ficticia con Albania para lavar el rostro del Presidente de los Estados Unidos-. Por otro lado, resulta increíble que en el conflicto bélico entre Israel y el grupo político militar Hamás se haya detonado por una incursión de estos últimos en el territorio de los primeros donde liquidaron a sangre fría a cientos de personas entre niños, ancianos, mujeres y hombres sin que el Mossad (Policía Israelí altamente calificada) haya detectado previamente los planes de este grupo terrorista. Israel es un país que durante la historia se ha mantenido en conflictos bélicos con sus vecinos palestinos por el territorio, por lo que está en alerta constante. La indignación por supuesto que es entendible pero la respuesta es por demás desproporcionada, ya que no se dirige directamente a Hamás; sino al pueblo palestino en general, Más bien, fue una acción desesperada de su primer ministro Benjamín Netanyahu ante la desaprobación de su pueblo para sostenerse en el cargo . En tanto, los países árabes ya están afilando las cimitarras (sables) para apoyar a los palestinos. En tanto los rusos y chinos están observando cómo entrometerse en este conflicto como respuesta al apoyo de la OTAN ( Organización del Tratado del Atlántico Norte) a los Ucranianos. Los Estados Unidos también se preparan para apoyar a Israel movilizando su flota y Aviación a ese lugar. El Mundo está en la cuerda floja con riesgo alto de caer en una conflagración mundial que nadie podrá detener. En tanto la inoperante Organización de las Naciones Unidas se la pasa condenando, pero sin resultado alguno. Es tiempo de cambiar a esta organización creando otra dotándola de la fuerza para hacer cumplir sus determinaciones de manera equilibrada en busca de la Paz, pero para ello, debe mudarse de los Estados Unidos y asentarse en un país neutral donde se le apoye financiera, tecnológica y hasta militarmente. No se puede permitir más bombardeos a hospitales, -hasta en la guerra hay reglas - como el que se llevó a cabo en Gaza con cientos de muertos cuya autoría niega Israel echándole la bolita a la Yihad Islámica, otro grupo militar de aquella región.

La anterior frase se atribuye a varias personas por lo que no voy a señalar a ninguno en particular, pero tampoco me la voy a adjudicar como propia ( no vaya siendo que me acusen de plagio). Lo importante de la misma, es el hecho de que en estos tiempos de guerra en varios frentes, que amenaza con una conflagración mundial y con la tecnología actual como la inteligencia artificial, se puede transformar una mentira en una verdad por los líderes del mundo que tratan de dar una imagen de justicia cuando en realidad son los generadores de la violencia, en aras de sus propios intereses. Las imágenes que se proyectan pueden ser manipuladas a favor de quien se quiera - como se presenta en la película Wag the Dog donde el actor Dustin Hoffman interpreta a un cineasta que manipula escenas para construir una guerra ficticia con Albania para lavar el rostro del Presidente de los Estados Unidos-. Por otro lado, resulta increíble que en el conflicto bélico entre Israel y el grupo político militar Hamás se haya detonado por una incursión de estos últimos en el territorio de los primeros donde liquidaron a sangre fría a cientos de personas entre niños, ancianos, mujeres y hombres sin que el Mossad (Policía Israelí altamente calificada) haya detectado previamente los planes de este grupo terrorista. Israel es un país que durante la historia se ha mantenido en conflictos bélicos con sus vecinos palestinos por el territorio, por lo que está en alerta constante. La indignación por supuesto que es entendible pero la respuesta es por demás desproporcionada, ya que no se dirige directamente a Hamás; sino al pueblo palestino en general, Más bien, fue una acción desesperada de su primer ministro Benjamín Netanyahu ante la desaprobación de su pueblo para sostenerse en el cargo . En tanto, los países árabes ya están afilando las cimitarras (sables) para apoyar a los palestinos. En tanto los rusos y chinos están observando cómo entrometerse en este conflicto como respuesta al apoyo de la OTAN ( Organización del Tratado del Atlántico Norte) a los Ucranianos. Los Estados Unidos también se preparan para apoyar a Israel movilizando su flota y Aviación a ese lugar. El Mundo está en la cuerda floja con riesgo alto de caer en una conflagración mundial que nadie podrá detener. En tanto la inoperante Organización de las Naciones Unidas se la pasa condenando, pero sin resultado alguno. Es tiempo de cambiar a esta organización creando otra dotándola de la fuerza para hacer cumplir sus determinaciones de manera equilibrada en busca de la Paz, pero para ello, debe mudarse de los Estados Unidos y asentarse en un país neutral donde se le apoye financiera, tecnológica y hasta militarmente. No se puede permitir más bombardeos a hospitales, -hasta en la guerra hay reglas - como el que se llevó a cabo en Gaza con cientos de muertos cuya autoría niega Israel echándole la bolita a la Yihad Islámica, otro grupo militar de aquella región.